Prensa I 1987
1) 2 de abril I El Comercio I Año 147 I Nº 78689 I Sección C I Cultural I Joven pintor viajará premiado a EE.UU. I Página C-15
El joven artista limeño Anselmo Carrera Rojas, alumno egresado de los talleres de Milner Cajahuaringa y Alberto Dávila en la Escuela Nacional de Bellas Artes, ha sido distinguido en mérito a su trayectoria con la excelente oportunidad de visitar, por espacio de tres meses, una serie de comunidades de artistas en Estados Unidos de Norteamérica.
Primer premio de dibujo en la IV Bienal Americana de Artes Gráficas del Museo de Arte Moderno de Cali, Carrera Rojas ha exhibido sus trabajos en exposiciones colectivas realizadas en Colombia, Venezuela, Noruega, Uruguay, España, Cuba, California, Inglaterra, Alemania Democrática y el Caribe.
En su no muy extensa, pero si importante trayectoria como artista, Carrera ha realizado una evolución plástica, desde la experimentación con el dibujo de tinta y papel hasta el uso del acrílico como posibilidad expresiva, logrando una obra de considerable valor artístico y de definido estilo. Dialogamos con Anselmo:
¿En qué consiste el premio que usted acaba de obtener?
Es un programa en el que, por primera vez participa Latinoamérica. La selección se ha hecho a través de una encuesta especializada entre 100 participantes, diez personas que representan cada una a un país. Es un programa mixto auspiciado por el gobierno de Estados Unidos y una entidad particular norteamericana. Consiste en una visita de casi tres meses a distintas comunidades de artistas, en diversos estados. Los organizadores nos hicieron contestar un cuestionario sobre lo que nos interesaría hacer en los recorridos.
¿Cómo participó usted en la selección?
La participación consistía en enviar transparencias de las distintas etapas del trabajo personal, con las indicaciones en cuanto a formato, técnicas, etcétera.
Su trabajo ha llegado a la etapa del acrílico ¿a qué obedecen esos cambios en el material de trabajo?
La misma evolución de mi trabajo me va exigiendo, me va llevando a otros tipos de necesidades. En este caso ya no es el papel el soporte, es el lienzo; ya no son los grabados y el grafismo, hay una mayor preocupación por la textura y la materia y eso me lo permite el uso del acrílico y también el óleo.
¿Fue siempre la pintura su principal actividad?
Siempre he tratado de dedicarme exclusivamente a la pintura. Sin embargo, casi cinco años trabajé al margen de lo que es el arte por una necesidad urgente, inmediata. Fueron quizá los años más duros de mi vida, puesto que tenía que soportar algo que no era pintar.
¿En qué momento pudo optar por el cambio¡
Hay una galería muy importante para mí, es Fórum, que fue un apoyo decisivo para mi carrera. Yo tenía un trabajo estable en una institución importante y decidirme a dejarlo por la pintura fue muy difícil. Fórum me apoyó y toda mi actividad plástica es posterior al abandono de esa estabilidad. Desde ese momento lo único que hago es pintar.
¿Cuándo emprende viaje?
Está por confirmarse la fecha, la propuesta está entre junio o agosto y puede haber una contrapropuesta de ellos. Una de las cosas interesantes que ofrece el premio es que, si el invitado desea, va a tener a su disposición materiales y taller para pintar. Considero que lo valioso de esta experiencia será la posibilidad de intercambiar ideas con otros artistas que van a estar en la colonia también.
En cuanto a su actividad plástica en Lima…
Estoy programado para realizar mi quinta exposición individual en setiembre en la Galería Fórum.
Su pintura en el contenido de la plástica actual…
Ahora la pintura se da como una diversidad de formas y manifestaciones y lo mío está dentro de esta diversidad que vendría a ser un poco el estilo de esta época. Es difícil hablar de un estilo en el arte porque está lleno de manifestaciones individuales. Quizá eso vendría a ser la característica de un estilo actual. Lo mío está inmerso en esto.
Extraoficialmente sabemos que otros dos artistas peruanos --Hernán Pazos y José Carlos Ramos-- han sido considerados como participantes suplentes en este excelente programa, para el caso que los seleccionados de otros países no puedan concurrir. Se da así la situación que sólo Perú y Argentina aparecen con tres artistas seleccionados. Lo que es muy significativo de la calidad de nuestros jóvenes artistas.

2) 28 de setiembre I Oiga I Exposiciones I Anselmo Carrera I Página 71
Anselmo Carrera. Este miércoles, en la Galería Fórum, se inaugura la sétima muestra individual del notable artista Anselmo Carrera, quien exhibirá diez piezas en acrílico y un mural de seis metros de largo. Carrera acaba de ganar el premio de la Fundación Reed-Fac IV, 1987, en Estados Unidos.


3) 28 de setiembre I Caretas I Año XXXVI I Nº 974 I Carrera en Forum I Páginas 65 - 66
Una importante muestra, del artista nacional Anselmo Carrera, se expone en Galería Fórum (Av. Larco 1150, sótano) a partir del miércoles 30. Carrera egresó de la Escuela de Bellas Artes y ya va por su sétima muestra individual, después de haber realizado numerosas colectivas dentro y fuera del país. Ganador de la IV Bienal de Artes Visuales, en Cali, Colombia y del premio de la Fundación Reed – Fac IV 1987, EE.UU.

4) 30 de setiembre I El Comercio I Año 148 I Nº 78870 I Sección C I Cultural I Anselmo Carrera: ‘Trato de recrear la realidad’ I Página C - 8
El pintor Anselmo Carrera inaugura esta noche una exposición individual en la galería Fórum de Miraflores 7.30 p.m. (Larco 1150-Sótano/Miraflores). Egresado de Bellas Artes, obtuvo en 1981, el primer premio de dibujo en la IV Bienal Americana de Artes Gráficas del Museo de Arte Moderno de Cali-Colombia. Desde entonces, la carrera de este joven pintor ha ido en ascenso. En febrero de 1988, Carrera partirá a USA gracias a una beca de la Fundación Reed que le permitirá recorrer varias colonias de artistas donde enriquecerá su ya cuajada obra. Dialogamos con el pintor.
¿Qué rumbos nuevos está tomando su pintura?
Lo que se ha incorporado aquí es la textura, mucho más cargada en cuanto a la materia, por lo tanto más evidente. Ella surge como una necesidad de hacer más expresivas las imágenes. En períodos anteriores, las texturas en mi obra eran casi manchas, ahora ha surgido la necesidad de ir incorporando materia para reforzar mis necesidades expresivas.
Su necesidad expresiva deviene en estilo y evolución en su obra…
Estos estilos corresponden a determinados momentos. Creo que esto está dentro de lo que es un sentimiento contemporáneo, tiene un contexto actual.
¿Se puede considerar que su trabajo, por lo menos en este caso, tiene unidad temática?
Puede haberla. Creo que puede ser la motivación para pintar la que va a dar un contenido y la forma en la que uno expone el tema. Yo lo que trato de hacer es una forma de realismo, no el imitativo, trato de recrear la realidad. Eso tiene que ver mucho con la época. El arte actual trata de expresar el espíritu de la época y aquí entra lo político, lo moral, lo cotidiano, lo sexual… Uno busca objetivarse a través de su obra y lo hace recreando lo que le toca vivir.
¿Cuál es el espacio del dibujo en su pintura?
Yo comencé haciendo dibujo pero como una manifestación autónoma, independiente de la pintura, en ella ha ido quedando algo. Ahora, las cosas han cambiado un poco; el color lo aplico con el mismo tubo de acrílico. A veces observo que mi tratamiento del color tiene partes como que son muy gráficas.
En su muestra hay un trabajo en formato grande, un mural…
Hay un mural de 7 x 2 metros. Son imágenes que sugieren torsos humanos. El resto de la exposición está compuesta por diez obras en acrílico todas de formato medio.
¿Por qué un mural?
Para mí era una necesidad de hacer algo en ese formato. Yo necesitaba crear imágenes en esa dimensión. Obedece al querer exteriorizar muchas ideas en un espacio más grande.

5) 5 de octubre I Oiga I V Etapa I Nº 349 I En la cultura I Anselmo Carrera. Torsos de sombra. I Ana María Cazzolo I Páginas 66 - 67
Recostado en la pared, Anselmo Carrera descansa ante las figuras de sombra pintadas en cartulina, transitorio mural destinado a ser removido muchas veces. La elaboración ha sido lenta y no plenamente consciente de su evolución como obra independiente y única. Ocupando seis metros de la pared central de la galería Forum, el mural es también la pieza principal de la muestra que presenta el artista hasta el 13 de octubre.
Desde 1983 no realizaba una exposición individual en Lima y en ese lapso se acrecentaron sus experiencias internacionales con participaciones en la Intergrafik de Berlín y en exposiciones en España, Cuba, Estados Unidos, Inglaterra y Colombia.
Sin embargo, Carrera no se ha atenido al camino fácil de una fórmula a repetir, aquella que pueda haberle dado éxito en algún momento, sigue en su búsqueda sin sentirse satisfecho, sin saber lo que hará más adelante pero liberando sus fantasmas a través de la creación. El próximo año expondrá por primera vez en Canadá, en una galería que lo solicitó a raíz de su intervención en la Intergrafik, y también gozará de una beca de la Fundación Reed, en Estados Unidos, que le permitirá recorrer varias ciudades de ese país, tomando contacto con artistas y tendencias, y trabajar por un tiempo en su propio taller. La selección para este premio fue muy rigurosa y se consideraron candidatos de todo el mundo.
Anselmo Carrera ha logrado dar forma a un conjunto muy coherente en el cual las imágenes están emparentadas por el color, el tratamiento y la composición, y en el que cuadros y mural dialogan y se miran, como lo hacen las partes con el todo. Los cuadros fueron trabajados una vez terminado el mural y la realización de éste demoró alrededor de dos años. “yo tenía esa cartulina pegada en la pared de mi estudio mientras trabajaba en otra cosa, en ella iba poniendo lo que quedaba en mi paleta y salpicaba la pintura que utilizaba, ni siquiera me alejé mucho al principio para observarla porque no hay mucho espacio en mi estudio y pintaba más sobre un lado. En ese mural hay muchas capas de pintura, en él iba dejando lo que tenía dentro, lo que no había sido expresado”. Lo que quedaba en su paleta no era sólo la pintura sino a la vez la vibración de los sentimientos. “Recuerdo siempre lo que una vez me dijo Tilsa: para pintar un cisne pinto primero su sangre. Es un poco lo que a mí me sucede, me interesa lo que está dentro; estas figuras no son vacías”.
El mural tiene dos sectores algo diferenciados, uno luminoso y uno oscuro; los torsos no está totalmente definidos en ninguno de los dos, pero en el sector oscuro son sombra sobre sombra y las pocas líneas sugeridas tienen un carácter ambiguo, dan lugar a varias imágenes. Los cuadros semejan acercamientos o recortes del mural, son insistencias en la figura humana con mayor o menor precisión; hay en ellos, con respecto al mural, voluntad de individualizar y de concentrar. Los seres de Carrera no se retuercen atormentados pero poseen la densidad de una dolida fuerza interior, la sombra es su cuerpo y esos cuerpos pesan. La ejecución pictórica de Carrera sigue aún los rumbos del trabajo con las texturas y del grafismo, con borrones, manchones y salpicaduras de acrílico, mostrando preferencia por variantes de las tierras. Su preocupación por la materia se siente en abultamientos y rayaduras, dejando con ello constancia de que no es sólo un vehículo para expresarse sino que ella misma es expresión.
La saludable insatisfacción de Carrera, combinada con la seriedad que aplica a su trabajo artístico, le hicieron enfrentar de manera peculiar su experiencia en la gráfica. El artista pasó una temporada en Colombia, practicando en el taller Prográfica que conduce Pedro Alcántara, donde se concentró sobre todo en las posibilidades de la serigrafía; Anselmo siente cierto rechazo por el trabajo en serie y por ello intenta que cada copia serigráfica lleve un toque diferente, rayando la superficie o realizando otros añadidos. Su trabajo en Colombia, donde las artes gráficas están muy avanzadas, lo llevaron a comprobar que la serigrafía no es una técnica tan fría.
Hablando de oficios y aficiones y del difícil camino del arte en el Perú conocemos sus experiencia teatrales en un grupo de su barrio y sus primeras desilusiones profesionales: “Trabajé varios años en la administración pública, después de egresar de la Escuela de Bellas Artes, porque no tenía dinero. Luego, decidí dedicarme de lleno al arte pero recomenzar fue muy difícil; entonces hacía muchos dibujos con la tinta que usan los carpinteros, que era lo más barato que encontraba”.
En las pinturas que ahora exhibe, Anselmo Carrera muestra la complejidad de su mundo interior y la honestidad de su trabajo pictórico.

6) 11 de octubre I El Comercio I Año 148 I Nº 78881 I Cultural I Crítica de Artes Plásticas I La síntesis dramática en Carrera I Jorge Bernuy I C - 15
Expresionismo: término que pone de manifiesto la importancia otorgada al acto físico de pintar, donde es el gesto que se hace significante, condensando u objetivando en la obra, la huella de la subjetividad del autor.
En Anselmo Carrera, pueden considerarse como elementos creadores, su turbulenta voluntad, su audaz sentido por lo grotesco y su actitud agresiva, animada por una intención antiestética. Artista joven que viene realizando una carrera metódica, sin apresuramientos, que le ha permitido conseguir un excelente oficio.
En la actualidad nos presenta una excelente muestra en la Galería Fórum de Miraflores, que estamos seguros estará entre las mejores exposiciones que esta galería presenta durante el presente año.
Carrera se caracteriza por representar el lado más descarnado de la pintura. Su gesto artístico es de una violencia extrema que, más que un gesto, es un ataque que Carrera infringe a la tela desde donde va surgiendo, sin ninguna premeditación, una realidad desintegrada, un gesto que tiene más de catarsis liberadora que de estetismo. Las figuras o casi figuras, que resultan de sus violentas pinceladas, se recortan unas veces sobre un espacio enrarecido de manchas gestuales, que se funden en el entorno como aplastadas a meras expresiones subliminales.
El interés de este pintor por la sistematización y la experimentación parte de una idea preconcebida que irá desfigurando, rompiendo, hasta llegar a una situación en que las formas quedan reducidas a meros escorzos que adquieren, bajo este gesto desfigurador, un aspecto tétrico, demoníaco, que nos permite descubrir su acierto en conciliar o hacer compatible la abstracción pueden coexistir en una relación dinámica sin caer en el descriptivismo.
Estas figuras, más que representadas, son sugeridas mediante la videncia de la pincelada chorreados de la mancha gestual del color. En este juego de ambigüedades y alusiones, Carrera le sabe sacar provecho al contraste del negro con el blanco puro.
También es de desatacar la síntesis cromática de la materia, de los rojos y grises, tratados con trazos certeros, logra contornos incisivos, menos preciosos, menos realistas, cediendo hacia una mayor abstracción.
Esta muestra constituye la síntesis más radical de lo figurativo que realiza este joven artista, que nos revela el dramatismo y la soledad de las tensiones actuales. En esta obra de Carrera hay una originalidad técnica cuyo desarrollo está alcanzando madurez, situándose como una de las grandes promesas que justifican la invitación que, por concurso, ha ganado para visitar Estados Unidos e intercambiar experiencias con diversos artistas de Europa y Latinoamérica.

7) 12 de octubre I Caretas I Año XXXVI I Nº 976 I Ellos & Ellas I ¡Anselmo Carrera! I Página 53
¡Anselmo Carrera!, respondió Claudia Polar cuando se le preguntó cuál es el pintor joven más importante de la Galería Fórum. Comparten ese entusiasmo Alicia Dibós, Rosita Larriñaga y Teresa Cambana, quienes fueron las primeras en llegar a la inauguración de la nueva muestra de Anselmo. Alicia Dibós adquirió uno de los más hermosos cuadros para enriquecer su colección. En primera fila estuvo también el famoso plástico argentino Rogellio Polesello –íntimo amigo de Anselmo- quien ha venido invitado especialmente por el CICLA, aprovechando su estadía para dictar unos cursos en la Escuela de Bellas Artes de Iquitos, y que esa noche celebró la calidad de Anselmo cuya fama es enorme en Colombia, Canadá, Suecia y Estados Unidos, a donde viajará próximamente Anselmo con la beca de la Fundación Reed. Quizás sintetice mejor la importancia de nuestro Anselmo, la opinión del crítico sueco Karl Oleg Olsen, quien dijo: “Comprar un trabajo de Anselmo Carrera es tener con 25 años de anticipación lo que será la más grande y profunda pintura peruana”.
